En mi vida siempre he estado rodeado de ellas. Son las que me han aportado esa feminidad que me envuelve y parte de mi dulzura, proveniente de mi corazón.
Por esa otra dama, que fiel compañera de Verano, es ejemplo de Matrona, de amor y de unidad. Sin ella no habría conocido lo importante que es la familia, sin ella mis días de Verano de la infancia hubieran sido días calurosos vacíos de sentido. Porque es la de los cuentos, las nanas, las cartas, las oraciones, las comidas familiares de los Sábados…porque tiene un ingrediente mágico, que con los años no pierde, que a base de practicarlo se conserva y es el AMOR por los suyos. Gracias por esos momentos, por esos valores que solo a través de ti he sabido aprender.
Mama, tía, abuelita, iaia, amigas del alma…felicidades, por emprender el reto de vivir la vida, por sonreír siempre, bajo cualquier circunstancia, por hacer de este pobre niño de ojos tristes, un hombre emprendedor y ávido de libertad.
Felicidades ayer, hoy y mañana.
Felicidades por ser el mito que siempre habitará en mi corazoncito.
Felicidades mujeres. Felicidades…